La vida nos brinda alegrías y también nos brinda momentos difíciles, sea por salud, dinero, enfermedad o pérdida de un ser querido, etc.
Y la psicología y sus investigaciones nos ayudan a entender las mejores maneras de afrontar los momentos difíciles.
Un concepto muy bien sabido pero muy difícil de aplicar es el mantener un pensamiento controlado, porque seamos sinceros:
Muchas veces sufrimos más con lo que pensamos que con lo que realmente está pasando.
Nuestra mente y cuerpo siempre buscarán protegernos y estar atentos de las amenazas, así lo observa Roy Baumeinster, conclusiones que encuentras en su trabajo “Bad is stronger than good”.
Es por ello que en momentos difíciles necesitas habilidad no solamente llevarnos por el instinto. Habilidad que nos haga enfocarnos en lo que realmente esté pasando, no proyectando sino confirmando.
Sí, se trata de afrontar la realidad a cómo es, esto con el objetivo de sufrir lo que la circunstancia amerita y no más allá por nuestras suposiciones catastróficas.
Lo segundo una vez podemos ver lo que es, definitivamente es enfocarse en las alternativas, en lo que puede salir bien y en las opciones y recursos que sí tenemos; lo que algunos llaman ser positivos.
Sí, mantener una actitud mental en las opciones, en forjarse una convicción de que sea como sea estás para hacerle frente a la circunstancia, que tienes personas al lado tuyo para apoyarte y que incluso algunas cosas fuera de tu control podrían suceder, no solo nos lleva a poder descubrir las opciones (no dejarlas pasar) sino que también influye tu coctel hormonal interno que interfiere mucho en tu misma salud.
Yo lo sé, lo he vivido que es muy difícil, pero también he descubierto reiteradas ocasiones que uno mismo se crea la peor opción y posibilidad en la mente y que eso influye nuestro estado de ánimo para hacerle frente.
Al final de cuentas se trata de inteligencia emocional, de utilizar el miedo para actuar, de utilizar la frustración para buscar alternativas o el estrés para saber que es momento de desacelerar.
Afrontar la realidad dándose cuenta de lo que realmente es, aceptar y enfocarse en lo que se tiene y puede salir bien. Al final de cuentas seamos sinceros: no cambia lo que es pero nos da recursos internos para mantenernos, encontrar e inclusive solucionar.
Mi deseo si estas pasando un momento difícil es que puedas mantener vivo y activos tus recursos internos, esos que te han permitido ser y llegar a donde has llegado, no renuncies a tu potencial.
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